El boxeo chileno está de luto. Este sábado se confirmó el fallecimiento del púgil nacional Godfrey Stevens, verdadera leyenda del pugilismo nacional.
El «Gringo» falleció en una casa de retiro en la ciudad de Camberra, Australia, país donde residía desde el año 1986.
Stevens, hijo de padre inglés y madre iquiqueña, nació un 27 de junio de 1938 en la población Juan Antonio Ríos, en Santiago.
Sus primeros entrenamientos los realizó en el Gimnasio México, uno de los lugares más importantes en la formación de púgiles nacionales.
Estaba en el ejército cuando fue invitado a la preselección para los Juegos Panamericanos de Chicago. Corría el año 1959.
Su carrera profesional comenzó en la década de 1960, específicamente en el peso pluma.
Stevens llegó a ser campeón sudamericano en 1967 y figuró entre los diez mejores de la categoría pluma a nivel mundial, lo que le entregó la oportunidad de disputar el título mundial en Japón ante el campeón Shozo Saijo.
Fue un 8 de febrero de 1970, a las 9 de la mañana, cuando el país se paralizó para seguir, en los aún pocos televisores, la transmisión de Televisión Nacional de Chile.
El púgil nacional lo dejó todo en el ring durante los quince rounds, pero terminó perdiendo por decisión unánime de los jueces.
La recepción a Stevens en nuestro país fue tremenda, casi como un héroe. Terminó retirándose de los cuadriláteros en 1977.
Stevens peleó en 85 oportunidades, con 71 victorias, 21 de ellas por la vía del nocaut, perdiendo en solo 3 oportunidades.
Escrito por Daniel Arellano
Fuentes consultadas: Memoria Chilena, La Tercera y Boxeadores
Foto: Emol
